Esta vivienda está situada en mitad de la calle principal de Ronda (Málaga): Calle la bola.
Es de las poquísimas viviendas situadas en la calle la bola ya que lo demás son tiendas.
La leyenda es la siguente:
Esto era un hombre que vivía aquí al que su propia familia acuso de haber robado sacos y sacos de las aceitunas de la familia.
Ese hombre pasó por muchos juicios mientras su vivienda seguía precintada con sus aceitunas dentro, pero nunca llegó a resolverse el caso y el hombre murió.
Desde entonces las aceitunas siguen allí dentro, intactas.
Dicen que, el espíritu de aquel hombre sigue custodiando sus aceitunas y quien se atreva a tocarlas sufrirá...
Yo puedo contároslo de buena letra, por que unos de mis familiares ayudó al juez que judgó a aquel hombre.
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